La velocidad adecuada está siempre...

Explicación

La velocidad adecuada al conducir un vehículo siempre debe estar dentro de un rango específico: por encima de la velocidad mínima establecida y por debajo de la máxima permitida.

Esto significa que, además de respetar los límites de velocidad, el conductor debe ajustar su velocidad teniendo en cuenta varias circunstancias.

Estas circunstancias incluyen las condiciones físicas y psíquicas del conductor, las características y el estado de la vía, las condiciones del vehículo y su carga, así como las condiciones meteorológicas, ambientales y de circulación en ese momento.
Por ejemplo, en una carretera con baja visibilidad o superficies resbaladizas, es prudente reducir la velocidad, incluso si está por debajo del límite máximo permitido.

¿Quieres hacer los test oficiales de la DGT?

Empezar el examen